El limón tahití es una variedad de lima ácida que se caracteriza por ser un fruto sin semilla, de color verde intenso y de sabor ácido y refrescante. Es originario del Mediterráneo Asiático, pero se adaptó muy bien al clima tropical de Colombia, donde se introdujo en 1947.
El limón tahití es un fruto muy versátil, que se usa tanto en la gastronomía como en la industria cosmética y farmacéutica. Tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas y digestivas, gracias a su alto contenido de vitamina C y ácido cítrico. Además, es un ingrediente esencial para preparar bebidas como la limonada, el mojito o la caipirinha.
Pero el limón tahití no solo es un fruto delicioso y saludable, sino también una oportunidad productiva y comercial para Colombia. Según PROCOLOMBIA, el limón tahití es la tercera fruta más exportada del país, después del banano y el aguacate. En 2022, las ventas de este fruto al exterior se incrementaron en un 170%, alcanzando los 35 millones de dólares entre enero y marzo.
El limón tahití colombiano ha logrado conquistar mercados exigentes como Estados Unidos, la Unión Europea, Canadá y Japón, gracias a su calidad y sabor. Además, se beneficia de las ventajas arancelarias que tiene Colombia con estos países, lo que le permite competir con otros productores como México o Brasil.
Actualmente, Colombia cuenta con 86 empresas exportadoras de limón tahití, provenientes de 17 departamentos. Los principales productores son Santander, Antioquia, Tolima y Risaralda, donde se cultivan más de 3.700 hectáreas de este fruto. El cultivo de limón tahití es rentable y sostenible, ya que genera empleo e ingresos para miles de familias rurales.
Para seguir creciendo en el mercado internacional, los productores de limón tahití deben apostar por la innovación y la diferenciación. Esto implica mejorar los procesos de cosecha y poscosecha, obtener certificaciones de calidad e inocuidad, diversificar los productos derivados del fruto (como jugos, aceites o pulpas) y explorar nuevos nichos de mercado. El limón tahití colombiano es un fruto con sabor a exportación, que representa el potencial y la diversidad del sector agropecuario nacional.
Es el resultado del trabajo y el esfuerzo de los citricultores colombianos, que cuidan cada detalle para ofrecer un producto excepcional. Por eso, el limón tahití colombiano es tan especial
